Actualmente, entre tantos acrónimos para los puestos de trabajo nos encontramos con el de CEO (Chief Executive Officer), lo que viene a ser Director ejecutivo o Consejero delegado. Se trata del responsable de la gestión y dirección administrativa de una empresa, siendo uno de sus pilares más importantes.
Son personas que deben tener ciertas características para poder desarrollar correctamente su trabajo, pero… ¿qué características debe tener un buen CEO?
Un buen CEO debe tener…
Lo primero que debe tener es honestidad, aunque a veces sea duro encajarla, pero es lo mejor. Esto es muy importante en puestos de liderazgo empresarial dado que el equipo con el que trabajará sabrá exactamente qué es lo que la empresa espera de ellos y marcará un camino a seguir.
Un buen CEO debe contar también con un claro espíritu emprendedor, buscar nuevas formas de sorprender al mercado, proponer soluciones originales y conseguir nuevos enfoques para mejorar las cifras de la empresa. La innovación es algo muy valorado en un puesto de estas características.
Esto va unido a una curiosidad natural e intrínseca. Una persona que sea curiosa y que no se conforme con saber sólo lo que sabe y siempre busque conocer más, tiene madera para asumir un puesto como este.
También debe contar con espíritu de equipo. No solo saber trabajar en equipo sino hacer que el equipo lo haga como si fuese uno solo, consiguiendo sacar lo mejor de cada trabajador, motivándoles para poder asumir cualquier clase de proyecto.
Otro aspecto muy importante que se debe valorar en un CEO es que tenga un claro enfoque hacia el cliente. Que no solamente piense en los resultados y en beneficios, que tenga la capacidad de empatizar con el cliente, de ponerse en su piel y asumir qué es lo que les gustaría y lo que no. De esta forma se podrá mejorar el producto o servicio que se les ofrece.
Obviamente, el sentido de la responsabilidad también es otro punto de gran importancia en este puesto de trabajo. El compromiso con la empresa debe ser total y la responsabilidad no radica solo en recibir las felicitaciones cuando todo sale bien sino en tener la entereza de asumir los fallos y poner remedio para que éstos no vuelvan a ocurrir.
Tener dotes de comunicación es estupendo, tanto para la empresa como para los trabajadores. No hay nada mejor que ser un buen comunicador para poder transmitir las ideas al equipo de una forma fiel a lo que se ha diseñado en una estrategia.
Para finalizar, otra característica muy importante que debería tener es pasión por su trabajo, uno de los motores que debería mover a cualquier CEO. Trabajar con una persona apasionada por su trabajo, un proyecto, su equipo, etc. es algo básico para obtener éxito.